TERM19_A2.rs3 (11) |
Left unit | Sense | Right unit | Relation type | Relation name | Tagger | rhetdb | Notes |
que si bien la ha enriquecido, al mismo tiempo ha puesto en cuestión algunos de sus conceptos básicos, como la univocidad nocióndenominación, el concepto de dominio de especialidad o el papel mismo de la normalización en terminologÃa. | <-- | Aunque los principios básicos de la normalización, como el consenso entre los sectores sociales implicados, mantienen hoy plena validez en la garantÃa de la comunicación especializada, en el trabajo terminológico práctico a veces se neglige la estrecha vinculación que debe existir entre normalización y sociedad. El peligro de que esto ocurra es que se rompa el equilibrio necesario entre un cierto grado de arbitrariedad, inevitable para el consenso, y el uso real de la terminologÃa por parte de los especialistas. En ese caso, la normalización no sólo dejarÃa de ser eficaz, sino que no cumplirÃa sus finalidades. | elaboración | N-S | A2 | | | |
Todos estos factores, además de provocar un aumento cuantivativo de la terminologÃa especializada, han implicado una ampliación de la perspectiva del trabajo en terminologÃa, | <-- | que si bien la ha enriquecido, al mismo tiempo ha puesto en cuestión algunos de sus conceptos básicos, como la univocidad nocióndenominación, el concepto de dominio de especialidad o el papel mismo de la normalización en terminologÃa.
Aunque los principios básicos de la normalización, como el consenso entre los sectores sociales implicados, mantienen hoy plena validez en la garantÃa de la comunicación especializada, en el trabajo terminológico práctico a veces se neglige la estrecha vinculación que debe existir entre normalización y sociedad. El peligro de que esto ocurra es que se rompa el equilibrio necesario entre un cierto grado de arbitrariedad, inevitable para el consenso, y el uso real de la terminologÃa por parte de los especialistas. En ese caso, la normalización no sólo dejarÃa de ser eficaz, sino que no cumplirÃa sus finalidades. | elaboración | N-S | A2 | | | |
En la sociedad actual se dan dos tendencias aparentemente contradictorias. | <-- | Por un lado, la necesidad creciente de armonización a nivel internacional, motivada por las interrelaciones e intercambios continuos de tipo económico, político y sociocultural, y, por otro, el reconocimiento de la diversidad, con la consiguiente afirmación de la individualidad, que se manifiesta en todos los ámbitos de la vida humana. | elaboración | N-S | A2 | | | |
En la sociedad actual se dan dos tendencias aparentemente contradictorias. Por un lado, la necesidad creciente de armonización a nivel internacional, motivada por las interrelaciones e intercambios continuos de tipo económico, político y sociocultural, y, por otro, el reconocimiento de la diversidad, con la consiguiente afirmación de la individualidad, que se manifiesta en todos los ámbitos de la vida humana.
La terminologÃa, actividad eminentemente social, debe conjugar también estas tendencias generales, a las que se añaden otras, como el progreso vertiginoso de las tecnologÃas, la evolución de las ciencias hacia la interdisciplinariedad y la hiperespecialización, o la inmediatez del intercambio de información caracterÃstico de la sociedad de la información. Todos estos factores, además de provocar un aumento cuantivativo de la terminologÃa especializada, han implicado una ampliación de la perspectiva del trabajo en terminologÃa, que si bien la ha enriquecido, al mismo tiempo ha puesto en cuestión algunos de sus conceptos básicos, como la univocidad nocióndenominación, el concepto de dominio de especialidad o el papel mismo de la normalización en terminologÃa.
Aunque los principios básicos de la normalización, como el consenso entre los sectores sociales implicados, mantienen hoy plena validez en la garantÃa de la comunicación especializada, en el trabajo terminológico práctico a veces se neglige la estrecha vinculación que debe existir entre normalización y sociedad. El peligro de que esto ocurra es que se rompa el equilibrio necesario entre un cierto grado de arbitrariedad, inevitable para el consenso, y el uso real de la terminologÃa por parte de los especialistas. En ese caso, la normalización no sólo dejarÃa de ser eficaz, sino que no cumplirÃa sus finalidades. | --> | En esta comunicación, a partir de la experiencia en trabajos de normalización de terminologÃa catalana, se planteará la necesidad social de la normalización terminológica, se comentarán algunas de las dificultades con que se enfrenta y se apuntarán ideas para su enfoque dentro de la sociedad actual. | fondo | N-S | A2 | | | |
Aunque los principios básicos de la normalización, como el consenso entre los sectores sociales implicados, mantienen hoy plena validez en la garantÃa de la comunicación especializada, en el trabajo terminológico práctico a veces se neglige la estrecha vinculación que debe existir entre normalización y sociedad. | <-- | El peligro de que esto ocurra es que se rompa el equilibrio necesario entre un cierto grado de arbitrariedad, inevitable para el consenso, y el uso real de la terminologÃa por parte de los especialistas. En ese caso, la normalización no sólo dejarÃa de ser eficaz, sino que no cumplirÃa sus finalidades. | interpretación | N-S | A2 | | | |
El peligro de que esto ocurra es que se rompa el equilibrio necesario entre un cierto grado de arbitrariedad, inevitable para el consenso, y el uso real de la terminologÃa por parte de los especialistas. | <-- | En ese caso, la normalización no sólo dejarÃa de ser eficaz, sino que no cumplirÃa sus finalidades. | resultado | N-S | A2 | | | |
La terminologÃa, actividad eminentemente social, debe conjugar también estas tendencias generales, a las que se añaden otras, como el progreso vertiginoso de las tecnologÃas, la evolución de las ciencias hacia la interdisciplinariedad y la hiperespecialización, o la inmediatez del intercambio de información caracterÃstico de la sociedad de la información. | <-- | Todos estos factores, además de provocar un aumento cuantivativo de la terminologÃa especializada, han implicado una ampliación de la perspectiva del trabajo en terminologÃa, que si bien la ha enriquecido, al mismo tiempo ha puesto en cuestión algunos de sus conceptos básicos, como la univocidad nocióndenominación, el concepto de dominio de especialidad o el papel mismo de la normalización en terminologÃa.
Aunque los principios básicos de la normalización, como el consenso entre los sectores sociales implicados, mantienen hoy plena validez en la garantÃa de la comunicación especializada, en el trabajo terminológico práctico a veces se neglige la estrecha vinculación que debe existir entre normalización y sociedad. El peligro de que esto ocurra es que se rompa el equilibrio necesario entre un cierto grado de arbitrariedad, inevitable para el consenso, y el uso real de la terminologÃa por parte de los especialistas. En ese caso, la normalización no sólo dejarÃa de ser eficaz, sino que no cumplirÃa sus finalidades. | resultado | N-S | A2 | | | |
Segments | Relation type | Relation name | Tagger | rhetdb | Notes |
se comentarán algunas de las dificultades con que se enfrenta | y se apuntarán ideas para su enfoque dentro de la sociedad actual. | lista | N-N | A2 | | | |
En esta comunicación, a partir de la experiencia en trabajos de normalización de terminologÃa catalana, se planteará la necesidad social de la normalización terminológica, | se comentarán algunas de las dificultades con que se enfrenta y se apuntarán ideas para su enfoque dentro de la sociedad actual. | lista | N-N | A2 | | | |
En la sociedad actual se dan dos tendencias aparentemente contradictorias. Por un lado, la necesidad creciente de armonización a nivel internacional, motivada por las interrelaciones e intercambios continuos de tipo económico, político y sociocultural, y, por otro, el reconocimiento de la diversidad, con la consiguiente afirmación de la individualidad, que se manifiesta en todos los ámbitos de la vida humana. | La terminologÃa, actividad eminentemente social, debe conjugar también estas tendencias generales, a las que se añaden otras, como el progreso vertiginoso de las tecnologÃas, la evolución de las ciencias hacia la interdisciplinariedad y la hiperespecialización, o la inmediatez del intercambio de información caracterÃstico de la sociedad de la información. Todos estos factores, además de provocar un aumento cuantivativo de la terminologÃa especializada, han implicado una ampliación de la perspectiva del trabajo en terminologÃa, que si bien la ha enriquecido, al mismo tiempo ha puesto en cuestión algunos de sus conceptos básicos, como la univocidad nocióndenominación, el concepto de dominio de especialidad o el papel mismo de la normalización en terminologÃa.
Aunque los principios básicos de la normalización, como el consenso entre los sectores sociales implicados, mantienen hoy plena validez en la garantÃa de la comunicación especializada, en el trabajo terminológico práctico a veces se neglige la estrecha vinculación que debe existir entre normalización y sociedad. El peligro de que esto ocurra es que se rompa el equilibrio necesario entre un cierto grado de arbitrariedad, inevitable para el consenso, y el uso real de la terminologÃa por parte de los especialistas. En ese caso, la normalización no sólo dejarÃa de ser eficaz, sino que no cumplirÃa sus finalidades. | lista | N-N | A2 | | | |
Por un lado, la necesidad creciente de armonización a nivel internacional, motivada por las interrelaciones e intercambios continuos de tipo económico, político y sociocultural, | y, por otro, el reconocimiento de la diversidad, con la consiguiente afirmación de la individualidad, que se manifiesta en todos los ámbitos de la vida humana. | lista | N-N | A2 | | | |